Estamos meditando en la Ley de Causa y Efecto, de lo kármico. Gran lama Tsongkhapa ha dicho en Lam Rim que en la práctica fundamental del Dharma, primero tenemos que aprender o meditar, cultivar la fe en ley de causa y efecto, en el Dharma esto significa aplicar lo meritorioso.
Practicar el Dharma significa que estamos más involucrados directa o indirectamente en acciones virtuosas o meritorias, las conversaciones meritorias y virtuosas, o las intenciones y motivaciones, digamos con las tres puertas, tres puertas quiere decir puerta de cuerpo, del habla y de la mente. Ahí empieza, esto abre todas las puertas de las acciones y detrás tendremos unas consecuencias.
Las cosas no van a surgir o resultar según deseamos o rezamos pero van a resultar definitivamente según nuestras acciones. Involucrarse de manera positiva tendrá una consecuencia positivia, meritoria tendrá una consecuenica meritoria, compasiva tendrá una consecuencia compasiva.
Hasta ahora cualquier cosa que hayamos obtenido, que ha caido encima de nosotros es todo por las acciones pasadas que hemos hecho.
Así que sin darnos cuenta, estamos involucrados en muchas acciones equivocadas o no equivocadas, esto tendrá su consecuencia. Nosotros no nos damos cuenta hasta que no llega la consecuencia que nos complica la vida y nos crea confusiones y entonces ya nos quejamos de que estamos pasándolo mal y sufrimos, pero muchas veces no queremos aceptar lo que hemos realizado nosotros.
Esto si lo reflejamos bien en nuestra vida, si pensamos bien en ello, podemos encontrar sus causas, lo que hemos realizado o en lo que nos hemos involucrado.
Si meditamos bien, reflexionamos bien cada una de las acciones y conversaciones, las motivaciones y fuerzas mentales, si son meritorias o no meritorias, virtuosas o no virtuosas y sus consecuencias, cuanto más meditamos en ello más claro lo tenemos, cómo funcionan las acciones positivas y negativas en lo que estamos involucrados cada día, desde siempre, con nuestros amigos, cómo ocurre las cosas en la sociedad.
Hay tres tipos de creencia, tres conceptos de creencia en el budismo. Creencia aquí no es una fe ciega, puede ser creencia como por una conexión de la vida pasada: tienes una creencia, devoción muy profunda y estable y viene de la vida pasada. Este tipo de fe no necesita mucho meditar o contemplar, ya tienes la convicción. En el segundo tipo de creencia, puedes llegar reflexionando bien, probando por tu propia meditación, entonces surge el conocimiento de que esto funciona así, y te convences que definitivamente. La tercera es “yo quiero alcanzar la budeidad, quiero alcanzar la sabiduría trascendental, la bodichita”. Tú crees y esperas que puedes lograrlo, es el tercer tipo de creencia, no hay más.
Tres: uno es inspiración, te inspiras por las cualidades, qué maravilla, sea en Buda, Dharma, bodistava, en lo que sea, es inspiración. Otra es creer que eso existe verdaderamente, esto puede venir por la conexión de la vida pasada, tenerlo muy claro y firme. Otra es por el aprendizaje.
Puede ser que nosotros tenemos algo de fe y creencia en Ley de Causa y Efecto y tenemos también una idea mas o menos de cómo funciona, y puede que creamos en muchas acciones positivas o que no creamos en las acciones negativas pero hay que convencerse más, hay que hacerlo más real, completamente. Esto depende de cada uno, tenemos que pensar en las diez acciones virtuosas y las diez no virtuosas, del cuerpo habla y mente. Realizamos estas acciones por el cuerpo habla y mente. Cada uno tiene sus consecuencias.
Eso son fundamentales, dice Lama Tsongkhapa que todo depende de aqui, si en este punto va bien, ya por supuesto que la alegría de la bodichita y la fé en la bodichita vienen solas.
Geshe Thubten Chöden
Extracto de Meditación en Lam Rim