miércoles, 20 de febrero de 2019

Lam Rim Camino Medio, sesión 4


Extracto del curso
Geshe Thubten Chöden
Enfoque Medio

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La meditación en temas de lamrim básicamente se trata en dos formas:  una es liberarnos de las ataduras de los engaños y otra es cultivar la sabiduría.

El tema de la renuncia se refiere a cómo nuestra mente suelta las ataduras de las emociones. Cuando el aferramiento se afloja, nuestra ira, rechazo disgusto y enfado por sí mismos se bajan. 
Hoy el tema de los engaños, reconocer los engaños.
Los engaños son la causa principal del sufrimiento, de la originación del sufrimiento. No hay que entender solo sufrimiento de la cesación de lo fisico o mental sino de todo lo relativo a la vida, no sabemos gestionar las cosas. 

Cuando nuestra sabiduría avanza, podemos comprender que hay unos niveles de engaños, de defectos y errores, unos más sutiles y otros más burdos que podemos comprender. Cuando nuestro nivel avanza  vemos que hay que profundizar.

El engaño empieza en el concepto del yo, del ego. Primero basándonos en nuestro concepto del cuerpo y la mente conceptualizamos el yo, y lo segundo nos aferramos a él, surge el apego. De ahi surge lo mio, y surge todo lo relacionado con ello, lo que me hace bien, lo mio, etc.. y de forma natural nos apegamos a lo que es mio y surge el rechazo y discriminación a lo que no es mio.
Y de ahi surgen los conceptos de lo no favorable a lo nuestro y lo mio, y surge el rechazo, y el desequilibrio. Surge el desequilibrio entre lo mio y lo demás,  siempre estamos corriendo detrás de esto y de ahi surge el orgullo, el resentimiento y de ahi surge también la envidia, los celos. 

Cada una de estas cosas  las tenemos que observar y reconocer, sus causas y su naturaleza, sus consecuencias y efectos. Tenemos que reflexionar en ello y contemplarlo.
Y sus objetos. Brevemente observar, eso nos ayuda para aflojar su energía. Si no, estamos agarrados muy fuertes.
Una meditación ve distinas técnicas, distintos textos. Una meditación es como una práctica del mindfullness. Cuando hacemos atención plena no hay que etiquetar las cosas, no hay que suponer mas que lo que es. Cuando observamos algo reaccionamos e interpretamos. Hay que ser consciente de ello. Eso es la atención plena, la observación pura.

Siendo conscientes de ello así, con el tiempo se pacifica todo por sí solo, los pensamientos agradables y desagradables, lo bueno y lo malo para nosotros. Los tratamos como si fueran fenómenos reales. Intelectualmente todos hablamos de ello pero no lo reconocemos como tal, el pensamiento como pensamiento. Existe por que es una imaginación, no es real, los pensamientos son asi, imaginaciones agradables o desagradables. Eso hay que recordarlo. 

Nos aferramos a lo agradable pero no es mas que la mente, pensamiento. Lo desagradable también no es mas que pensamiento. Poco a poco con estos conocimientos hay que observarlos: surgen y desaparecen por sí solos cuando los observas. Eso es una meditación. Estas cosas ocurren dentro de nosotros. Comprenderlo es facil. 

Hay que conocer cada uno de los objetos del apego, del enfado etc. Los objetos: colores, formas… de lo agradable surge el apego y luego el aferramiento. El aferramiento hace que veas el objeto más sólido. Cuando más te aferras, te imaginas el objeto mas fuerte, lo conceptualizas más. Recuerda esto. Si reconoces que estas haciendo esto te vas a encontrar con una sensación interesante e inspiradora. Estas observaciones son muy importantes. Si haces esta meditación frecuentemente ya vas a reconocer enseguida cuando estas apegandote, aferrandote… y se van a aflojar, su energia se afloja y te sientes más feliz, no tienes miedo ni confusiones. Porque cada vez lo estás reconociendo mas, no solo que lo has oido sino que lo has experimentado.
Esta es la tarea del camino medio del Buda, a traves del propio conocimiento y experiencia.

Las emociones son inestables, no tienen un motivo firme. Tenemos que distinguir entre los intereses y los apegos.  Hay intereses que son saludables, no apegos. Algunos son buenos para nuestra salud mental, fisica o para protegernos, estan motivados por algo real, no es apego… a traves de la meditación lo distinguimos. El apego nos deja sensación de atadura, su esencia y su causa es la ignorancia y la sensación es de estar atado y de  dificultad de separarse de ello, nos mezclamos con el objeto del apego.

Naturalmente de los objetos feos o desagradables, imagenes o cualquier otro tipo de objetos, surge el rechazo. Los ves igual de sólidos. Lo agradable y lo desagradable lo ves igual de sólidos. Cuanto más rechazo sientes más desagradable lo ves. Buscas emociones y sentimientos equivocados,  buscas y generas ansiedad, hay que recordar el equilibrio y la ecuanimidad, la paciencia. 
Cuanto mas tenemos ansiedad y buscamos sentimientos y emociones, de forma natural rechazamos la sensación negativa y creamos un desequilibrio. El desequilibrio es algo que todos conocemos. 
Todo tiene su mecanismo, así conociendo eso nos ayudamos para saber lo que son realmente, reflexionamos en todos los pensamientos agradables y desagradables. Observamos como los objetos generan adicción. 
En primer lugar la gente aqui lo entiende mal porque al hablar del apego o aferramiento piensan que ya no hay que disfurtar nada, pero no es lo mismo el apego y el aferramiento que los intereses. Las cosas que deseas muchas veces no son apegos… compasión y amor es un deseo, bondad es un deseo.. son deseos saludables. Son motivos y preocupaciones reales según el dharma.
Según el dharma no nos estamos preocupando realmente por nosotros, nos quejamos pero no sabemos cómo practicar para liberarnos. Porque todo está impulsado por las emociones y puede que estemos impulsados por un capricho y satisfacer nuestro ego, impulsado por nuestra envidia y el ego.


Vamos a reflexionar un poco cómo surgen los engaños, cómo empiezan, cuales son sus funcionamiento. Meditación.